El cheque de pago diferido (CPD) es una orden de pago cuyo vencimiento opera con posterioridad a la fecha de su emisión. El plazo máximo para la fecha de pago de un CPD es de 360 días. Los mismos pueden ser patrocinados (cuando la solicitud incumbe a la libradora) o avalados (por una sociedad de garantía recíproca o una entidad financiera).

Así como puede adquirir bonos públicos del estado, puede invertir su capital en deuda privada a través de las Obligaciones Negociables (ON). Dada la relación directa entre el tomador y el emisor, que facilita el mercado de capitales, las tasas de interés suelen ser relativamente más atractivas que las que ofrece el sistema bancario.
Grandes empresas, como pequeñas y medianas, emiten este tipo de instrumentos en el mercado. Como inversor, puede acceder a colocaciones con una mayor o menor relación de riesgo-rentabilidad dependiendo de la calidad de la empresa y de las características de emisión.

La caución es una opción para quienes quieren proteger sus ahorros, es similar a un plazo fijo, pero con las ventajas del mercado financiero. Es un instrumento ideal para quienes busquen preservar el capital obteniendo rendimientos superiores al de otras alternativas similares.